domingo, 27 de mayo de 2007

LA REALIDAD Y LA OBRA DE LICHTENSTEIN






Por infinidad de razones, y ninguna de ellas de peso, no fui a ver la exposición de Lichtenstein que durante este mes de mayo podía visitarse en la fundación Juan March.Tenía ganas de ver su obra porque siempre la he sentido como un negativo de la realidad. Él, mediante puntos aparentemente inconexos, que por sí mismos poco o nada dicen, consigue configurar un retrato de la realidad sólo visible en la distancia. Pero, ¿no es la realidad la antítesis de dichos cuadros?
Si las personas fuésemos los puntos de sus obras, desde la distancia no se observaría más que una masa informe en movimiento. Por el contrario, observando a cada individuo todo cobra sentido, todo recupera su lugar quizás porque no existe una única realidad sino tantas como personas, quizás porque la realidad no es otra cosa que lo que vivimos o, mejor dicho, lo que sentimos.


(s_gg)
(ilustrando el texto, dos de sus obras, Mujer en el baño (que puede verse en el Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid) y Girl with hair ribbon)






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